Leemos en Efesios 4:11-15 “Y CRISTO mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo, de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor”.
Empecemos verificando los requisitos del Apóstol original del primer siglo. Cristo tuvo 13 apóstoles. Doce antes de la cruz y a Pablo después de la resurrección.
Las señales e indicadores de apóstol en el I Siglo son muy claros.
(1) Haber sido testigo ocular de Cristo en el antes y en el después de su resurrección (Hechos 1:22, Hechos 10:39-41, 1 Corintios 9:1, 1 Corintios 15:7-8),
(2) Poder comprobar su apostolado con su llamado y con el poder de Dios en señales y milagros (Mateo 10:1-2, Hechos 1:5-8, Hechos 2:42, Hechos 4:33, Hechos 5:12, Hechos 8:14, 2 Corintios 12:12, Hebreos 2:3-4),
(3) Haber sido escogido y llamado directa y personalmente por el Yahshúa el Cristo de Dios (Marcos 3:14, Lucas 6:13, Hechos 1:2, Hechos 1:24, Hechos 10:41, Gálatas 1:1).
(4) Una vez elegido directamente por YAHSHÚA en la era del Mesías, ser encaminado con la comisión específica de no entrar en camino de samaritanos ni gentiles, sino de ir a recorrer todas las ciudades de Israel en el país de Judea del primer siglo como en Mateo 10:5,8.23 hasta la venida del Hijo del hombre que se cumplió como escatología realizada en el año 70 d.C.
Tenemos 18 versículos muy claros sobre la originalidad de un apóstol original especifico de YAHSHÚA. El apóstol Pablo enseñó que él fue el último en ver a Cristo resucitado. “… Y al último de todos, como a un abortivo, me apareció a mí” (1 Corintios 15:8). Por lo tanto, hoy No hay apóstoles de ese corte y talla original.
Los cinco ministerios del I Siglo como apóstol, profeta, evangelista, pastor, maestro, fueron para el ministerio de las dos casas de Israel: judíos y gentiles, es decir, los dos palos de Ezequiel 37:16-19 que fueron el palo de Judá y el palo de Efraín, que por el evangelio de la circuncisión de Pedro y por el evangelio de la incircuncisión de Pablo (Gálatas 2:7) llegaron a constituir el remanente escogido por gracia de Romanos 11:5 y el gran cuerpo de Cristo del I Siglo de 1 Corintios 12:12,13 dónde por un solo Espíritu judíos y griegos fueron bautizados en un solo cuerpo y a todos los llamados se les dio a beber de un mismo Espíritu. Estos dos grupos, fue lo que Pablo en Efesios 2:14-18 dijo que Cristo era Su “Shalom” o Paz, que de ambos pueblos hizo Uno y lo logró “Derribando la pared intermedia de separación, aboliendo en Su carne las enemistades de ellos, para crear en sí mismo de los dos Un solo y Nuevo hombre, y los reconcilió en Un solo Cuerpo y por de él los unos y los otros tuvieron entrada por Un mismo Espíritu al Padre. Tanto el AT como el NT fue para una sola casa que fue la casa de Israel.
A la gente de estos “Dos Palos de Israel” se les profetizó en Jeremías 31:31-34 el Brít Jadasháh o el “Pacto Renovado” que no fue en sí ningún “Nuevo Pacto” expresión que la colocaron en las versiones de la biblia, la Septuaginta griega y la vulgata latina romana y por eso, se enseña sobre el mal llamado “Nuevo Pacto”. Las dos casas de Israel, no necesitaban un nuevo pacto sino una renovación del pacto.
Los cinco dedos de la mano de Dios que fueron los cinco ministerios de Efesios 4:11 Dios los llamó y constituyó en original a “Perfeccionar” a los santos “judíos y griegos” convertidos a Cristo, para edificarlos en aquel que no conocían en el judaísmo ni en el gentilismo. Todos ellos: habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de la salvación, y habiendo creído en Cristo, fueron sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las arras de su herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de Su gloria (Efesios 1:13).
Hay dos preposiciones en Efesios 1:13 dónde hay un “Hasta” y en Efesios 4:11 hay otro “Hasta”. Un Hasta es un límite en relación con tiempo, espacio, cantidad y una acción.
Los cinco ministerios: apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros, fueron la mano conducente de Dios para perfeccionar HASTA que todos llegaran a la Unidad de la Plenitud de Cristo, que fue el Conocimiento Pleno del Hijo de Dios. El conocimiento pleno es lo que se conoce como la “Plenitud” de Dios.
Verifiquemos I: Fue el Cristo resucitado mismo quién constituyó a estos cinco dedos como los originales. En el mismo primer siglo, hubo falsos dedos o apóstoles en 2 Corintios 11:13 que se disfrazaron de apóstoles de Cristo y estos fueron los maestros judaizantes del judaísmo para seducir a los creyentes de gracia a regresar al templo y a la ley judaica como en Gálatas 3. La evidencia interna de los cinco dedos a través de las epístolas no admite a otros cinco dedos post apostólicos a siglos posteriores. El título hoy en día de “apóstol” es solo una repetición sin sentido. Los líderes de la Filoprimatosis (Primer posición o lugar) les gusta que el pueblo los adule con el título de apóstol. Esa es la pseudo moda moderna. Ninguno de ellos, está dispuesto a quitar de en medio el constructo que han hecho con el término “Cobertura” apostólica y profeta. Quieren sostener su “Enramada” personificada con el público de su cobertura. Esto no es Reino. Esto es Iglesismo.
El oficio del apostolado fue el de “Servir” al “Cuerpo de Cristo”. El fundamento de la Fe en Cristo ya está colocado. Tito 1:4 habló de la “Común Fe” y de la “Fe una vez dada a los Santos”. Los cinco ministerios ya establecieron la Fe dada a los santos. Todos los que estamos después del I Siglo, por el conocimiento de las Escrituras, nos fundamentamos en la Fe dada.
He oído a algunos “apóstoles de hoy” decir que el fundamento de la Fe no es suficiente y que se necesita implantarlo de nuevo y/o que el fundamento de Cristo está incompleto y no consumado y el trabajo de ellos es refundamentarlo y esto es ¡Falso!.
La expresión “A FIN DE” de Efesios 4:12 indicó el propósito y ¿Cuál fue? Que los judíos y gentiles en Cristo, fueron formado en ellos como en Gálatas 4:1, todos estaban creciendo en gracia como en 2 Pedro 3:18, porque cuando corría el año 67 d.C. de la carta a los hebreos en hebreos 5:12 al 6:3 todavía eran niños, dándosele alimento de leche y por eso, eran inexpertos en la palabra de justicia, dependiendo de los rudimentos de la doctrina de Cristo y se les animaba a ir hacia la perfección o plenitud.
Todos en el I Siglo, estaban dentro de lo parcial y estaban transicionando a Plenitud como en 1 Corintios 13:8-13 y por eso, respecto al pleno conocimiento todos estaban tratando de llegar a la unidad de la Fe o de las creencias acerca de Yahshúa el Cristo. El adverbio “PARA” en Efesios 4:12 mencionó la meta de los Cinco Ministerios que fue la edificación del cuerpo de judíos y gentiles en Cristo. La preposición “HASTA” indicó un límite de tiempo y de propósito, que todos llegaran a la Unidad de la Fe o de las creencias en el mismo conocimiento del Hijo de Dios, cerrando el límite en hebreos 12:2 cuando se reveló la Fe Consumada que se dio en el año 70 d.C. Ya no había más que consumar sino afirmar con un “Amén”.
El fundamento YAHSHÚA EL CRISTO o el “Mashiahj” o “Mesías” Ya fue colocado en el I Siglo, para todos caminemos firmes sobre el piso de ese fundamento. Es una falsedad, hablar hoy de un refundamento apostólico o profético.
Si hoy en día hubiese una sucesión y resucesión de los cinco dedos de Efesios 4:11 entonces, el fundamento de Cristo, necesitaría un “Nuevo Canon” o un “Nuevo modelo de base o aun una “Nueva estructura”, es más, necesitaría de un “Nuevo evangelio redefinido” y quizás algún tipo de cambio en el cimiento o afirmación de Fe que sea nueva y hecha por los posts “apóstoles” del I Siglo a hoy, nacidos después del año 70 d.C., o del primer siglo y esto crearía una falsa re revelación, re inspiración y una re iluminación y fuera de Cristo no hay reres.
En el Reino no hay Cinco Ministerios, solo existe un gran dedo de los “Ebeds” del hebreo “Siervos”. En Filipenses 2:7 Yahshúa tomó forma de Ebed o de siervo. En Gálatas 1:10 Pablo fue un Ebed de Cristo. El Reino es de Ebeds. Cuando entramos al griego, usa el término “ministros” del griego “Diakoneo” que significa el que “Sirve a otro” para beneficiarlo sin esperar ser beneficiado.
Yahshúa dijo que el que quiere ser grande en el Reino, debe ser vuestro servidor. El Reino es una cuestión de funciones no de posiciones piramidales, ni de jerarquías. Todos somos “Ebeds” o servidores con diferentes talentos, dones, capacidades, habilidades y funciones de responsabilidad que enriquecen al Reino Unido de Dios.
Verifiquemos II: El tiempo de estos cinco ministerios de Efesios 4:11 tuvo un límite ¿Cual fue ese límite? Llegar a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo. ¿Qué significó "HASTA"? Que estos cinco dedos no cesarían de funcionar en el primer siglo, mientras no llegaran todos a la Unidad de la Fe, es decir, al Varón Perfecto de la Fe Consumada. Cuando Pablo mencionó la palabra "TODOS", es porque no todos los judíos y gentiles de la casa del Israel de Dios de Gálatas 6:16 habían llegado a la madurez del varón perfecto en Cristo.
Verificación III: Esto nos revela que Pablo no habló de una doble constitución de ministerios, es decir, no habló de ellos y después de ellos otros y más otros y todos estos cuántos. Los originales vivieron todos en el primer siglo y pusieron el único fundamento ¡Jesucristo! En judíos y gentiles, las dos casas de Israel, ¿Qué fundamento van a poner los cinco ministerios después de los originales? Los cinco dedos originales colocaron a Jesucristo como único y original fundamento en un terreno completamente nuevo en el primer siglo. La gente en este siglo no conocía a Cristo. El siglo XXI ya tiene un solo fundamento que es CRISTO, entonces, ¿A qué los apóstoles? Nosotros en el Reino, somos los Ebeds que fundamentamos todo en Cristo, de Cristo y por Cristo.
Pablo enseñó en Efesios 3:5,6 que el misterio le fue revelado a él y los santos apóstoles y profetas que los “Gentiles” son coherederos y miembros del mismo Cuerpo y que Cristo es el Todo y en Todos y ya en él no hay judío ni griego (Colosenses 3:10,11).
El Reino es el Fundamento y la Plenitud es estado máximo de completitud en Cristo. En el Reino se terminaron las razas y los pueblos con diferenciaciones. La circuncisión era un rito. En Cristo ya no hay rito alguno.
Verificación IV: Todos los cinco ministerios estaban lidiando con los niños en Cristo para que no fluctuaran en la Fe de creencias, que fracturaban la Unidad de la Fe, ni se dejaran arrastrar por las tres olas o vientos o corrientes erráticas del I Siglo como fueron los docetistas, los gnósticos, los cerintianos y los maestros judaizantes.
La primera amenaza vino del Docetismo. Las palabras "Parecer", "Tener apariencia" vienen de doceto o docetista que fue un grupo que, en el primer siglo, sostenían que la primera venida de Cristo o Parousía física a la tierra sólo fue como una "Apariencia" y no una legitimidad o encarnación real. Para ellos, le era imposible asimilar que Dios siendo Espíritu encarne en un vaso humano o físico o en carne.
El docetismo enseñaba que la materia era mala, especialmente la carne; por lo tanto, esta doctrina no podía aceptar la idea de que lo divino pudiera formar una unión con lo humano mientras los hombres vivieran en la carne.
El docetismo del primer siglo negaba enteramente la humanidad de Cristo, pues consideraba que lo que se vio fue sólo una visión. Cuando Pablo habló a los efesianos en Efesios 4:14 de los niños llevados por todo viento de doctrina de erros se estaba refiriendo a los docetistas. El docetismo, sutil tanto en su pensamiento como en sus métodos, fue un serio problema, incluso para los cinco ministerios del tiempo de Pablo y Juan. Pablo se ocupó de algunas formas de docetismo en su epístola a los Colosenses. Juan tuvo en mente al docetismo cuando escribió la exhortación a los creyentes para que recordaran que Yahshúa pudo ser tocado y palpado y que habitó entre los hombres como una realidad (1 Juan 1:13). Juan llamó con el término "anticristo", a la herejía de los docetistas.
La segunda amenaza que tuvieron los niños fluctuantes y los cinco ministerios fue el Gnosticismo. Gnosis es del griego y significa “Conocer”. De Platón, el gnosticismo basó sus dos falsas premisas. Primero, adoptó un dualismo en cuanto al espíritu y la materia. Los gnósticos aseguraban en el primer siglo que la materia era inherentemente mala y el espíritu era esencialmente bueno. Como resultado de esa presuposición de la materia, los gnósticos creían que nada hecho en el cuerpo, aun los más grandes pecados, tienen importancia alguna, porque la vida real existe solamente en la realidad del espíritu. Ellos pasaron por alto que Dios lo hizo todo bueno en gran manera.
A Juan apóstol le tocó confrontar el gnosticismo griego. En 1 Juan 2:4 cuando Juan habló del que dice conocer y no guardar los mandamientos, era un mentiroso, y se estaba refiriendo a los gnósticos. Estos gnósticos vivían en inmoralidad. Eran los que asumían haber conocido a Dios o haber recibido el don pneumático de Dios. Sin embargo, Juan dice que los tales son mentirosos.
Juan acusó de engañador a aquel gnóstico que diciendo que conocía a Dios y viviendo en inmoralidad, no guardaba los mandamientos de Dios. Practicaban la licencia para la vida inmoral. Ellos le decían a la gente que habían sido elevados a la cúspide de la experiencia extática y Juan los reprende y les dice en 1 Juan 1:8 "Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros". Juan, con esto, enseñó la naturaleza pecaminosa, con posibilidad de pecar y enseñó que quién peca, necesitaba la purificación por la sangre de Cristo Jesús que nos limpia de todo pecado (1 Juan 1:7).
Los gnósticos también enseñaron que ellos eran los grandes iluminados o que andaban en la luz, y por lo tanto eran superiores a otros, inclusive a los otros creyentes que no disfrutaban de la gnosis selecta. Los otros creyentes no alcanzaban la iluminación porque eran más carnales, menos capaces para lo que se había de discernir espiritualmente. Ante tal pretensión el apóstol Juan vuelve la frente para condenar tal actitud en 1 Juan 2:9 "El que dice que está en la luz, y aborrece a su hermano, está todavía en tinieblas". Juan abiertamente les dice que tales "iluminados" andaban en la oscuridad.
Juan en 1 Juan 4:8 termina dándole el golpe final a las pretensiones de los gnósticos, "El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor". De manera que a ese conjunto mezclado de experiencias "místicas", "extáticas", "pneumáticas" gnósticas Juan se vio enfrentado y su ministerio consistió en edificar a los niños en Cristo, inmaduros y simples, a que no fluctuaran del conocimiento de la verdad en Cristo.
Los gnósticos también enseñaron que para conocer a Dios se necesitaba la “iniciación” para llegar a sentir ese contacto directo con la presencia de Dios. Hacían pre encuentros con Dios y así excluían a los creyentes que no contaban con esta "capacidad" y por eso, Juan les dice a los gnósticos que el que tiene amor ha conocido a Dios.
Estos gnósticos estuvieron dentro de la gente y por eso, al ser enfrentados por Juan y escribió en 1 Juan 2:19 "Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros" y a los creyentes que se quedaron firmes le dijo en 1 Juan 2:24 que no se afanara por conocimientos gnósticos, porque ellos tenían la unción del santo "Pero la unción que vosotros recibisteis de él permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe; así como la unción misma os enseña todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, según ella os ha enseñado, permaneced en él" (2:27).
La tercera amenaza a la que se vieron enfrentados los cinco ministerios fue el judaísmo y sus maestros judaizantes. En el concilio en Jerusalén, vinieron de Judea algunos de la secta de los fariseos que habían creído en Cristo, pero todavía predicaban que la salvación venía por el cumplimiento del rito de Moisés la circuncisión. Pablo, juntamente con Pedro, Juan y Santiago acordaron en Hechos 15:11 que por gracia eran salvos tantos los judíos como los gentiles, pero en Gálatas 2:14-21 Pablo tuvo que resistir cara a cara a Pedro porque movía su fe en dos bandos. Antes que viniesen los discípulos de Jacob/Santiago, comía las viandas de los gentiles; pero cuando aparecieron los judíos se apartaba y retraía de los gentiles (no tenía comunión con ellos) porque le tenía miedo a los de la circuncisión y Bernabé también cayó en esa simulación e hipocresía. Pablo les demandó que no andaban rectamente conforme a los que habían acordado en el concilió en Jerusalén.
Pablo le dijo a Pedro que era una hipocresía siendo judío vivía como los gentiles y obligaba a judaizar a los gentiles o a volver al judaísmo con sus requisitos de la ley judaica. Pablo le dijo a Pedro yo ya no vivo en las obras de la ley sino en la fe de Cristo y el que vive en el judaísmo desecha la gracia de Dios; porque si la ley se hubiera establecido para la justicia ante Dios, entonces por demás murió Cristo.
Pablo en Gálatas 1:4 les enseñó a los creyentes de la provincia de Galacia, que Dios por medio de Cristo no sólo los había rescatado del pecado, sino también del presente siglo malo que era el judaísmo. La edad del judaísmo era la edad del siglo de Pablo y de los cinco ministerios. Pablo había a afirmado a los creyentes de esta provincia en la fe de Cristo, pero cuando regresó descubrió que algunos se habían alejado de esa firmeza y confianza de Fe en Cristo. El evangelio de Pablo estaba por fuera del judaísmo.
Muchos gálatas al llegar Pablo a la provincia, estaban en el judaísmo, había retrocedido, eran niños fluctuantes que fueron llevados por la ley de los maestros judaizantes y comenzaron a seguir ese entre comillas evangelio judío. Pablo les enseñó que la observancia de la ley no llegaría ser jamás un evangelio o una buena noticia capaz de librar a los pecadores de la esclavitud de la ley ni de conducirlos a disfrutar a Dios; que sólo los podría sujetar como esclavos bajo el cautiverio de la ley, atándolos al yugo de la maldición de la ley, Gálatas 5:1.
Pablo tildó a los judaizantes que había creído y retrocedido al judaísmo de falsos hermanos, Gálatas 2:4. Estos retrocesos estaban perturbado en la región a los creyentes y distorsionando la gracia y pervirtiendo el evangelio de la verdad de Cristo, y extraviando así a los niños en Cristo o débiles de fe y trayéndolos de egreso a la ley de Moisés.
Pablo tuvo que recordarles lo que él hacía en la religió judía. Pablo fue miembro de la secta de los fariseos. Les dijo que la religión judía solo era un compuesto de tradiciones de rabinos sin inspiración divina. Les dijo que Dios lo había llamado por medio de la gracia y no por la ley anunciada por Moisés. Que Cristo es muy superior al judaísmo y sus tradiciones. Los retrocesos o judaizantes habían fascinado a los Gálatas hasta el punto que éstos consideraban las ordenanzas de la ley como si fuera un evangelio de la ley superior a Cristo.
La lucha de los cinco ministerios fue presentar la revelación salvífica de Cristo y confrontar el judaísmo con sus tradiciones muertas que habían recibido de sus antepasados. Pablo les dijo que cuando Cristo es revelado a la conciencia, Dios no lo hace por medio de un acto externo, sino interno, no por una visión exterior sino por ver interiormente. Que Cristo no es una revelación subjetiva sino una revelación objetiva con profundo fundamento.
Los cinco ministerios también se vieron enfrentados a la apostasía del primer siglo. Pablo al escribirle a Timoteo en 1 Timoteo 4 le dice que al estar ya en los postreros tiempos o en el cierre de los ciclos del tratamiento de Dios con el hombre de esa generación, muchos creyentes y/o niños en Cristo y débiles en la fe, apostatarían de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a enseñanzas o doctrina de demonios.
La palabra “espíritus” es del griego “Pneumas” que significan “Animaciones” o “Alientos” o “Vientos”. Pablo y los cinco ministerios ya estaban en el cierre de los postreros tiempos. El tempo que sigue de postrero es el tiempo de plenitud. Muchos niños en Cristo estaban escuchando la cátedra engañosa de los docetistas, los gnósticos, de los judaizantes y de los apostatas del primer siglo. Todo ellos fueron espíritus o Pneumas o animaciones engañosas. Era tiempo de decadencia espiritual antes de la venida o Eleusía de Cristo en gloria y en juicio.
Todos estos niños en Cristo se estaban apartando de la Fe Objetiva que tenía el contenido firme de su creencia en Cristo. Estos niños no sabían discernir entre el espíritu de verdad y el espíritu de error, 1 Juan 4:6. No sabían comprender entre el que tenía la animosidad de la confesión de la encarnación de Cristo. Su Fe estaba claudicando entre dos objetivos, por eso, Juan en 1 Juan 4:1 les dice No creáis a todo espíritu, sino probad a los espíritus o animosidades si son de Dios, y les habló de los falsos profetas que fueron los Gnósticos judíos. Juan como apóstol les dijo que el espíritu del anticristo ya estaba en acción en aquellos postreros tiempos al cierre de todos los cumplimientos y de la pronta venida o Eleusía de Cristo en juicio y/o en gloria.
Los espíritus o animaciones de los hombres engañadores estaban en pura acción. Todos ellos fueron el contraste al Espíritu de la gracia de Cristo. La palabra demonio es la tildación a ídolos paganos, enfermedades mentales u orgánicas, y a mensajes opuestos al mensaje de Dios. Demonios en la biblia nunca estuvo referido a espíritus aéreos, cósmicos o sobrenaturales. Un demonio en la época de Pablo fue una contradicción al bien, al orden, a la justicia, al equilibrio, a la armonía y a la fe en Cristo.
Las enseñanzas de los demonios bajo el tiempo de apostasía fue la de los docetistas, gnósticos y judaizantes y apostatas. Todos ellos se juntaron y reunieron las mentiras para engañar a los niños en Cristo de las iglesias del primer siglo.
La actitud infantil de los niños en Cristo no les permitía avanzar a la perfección o al Teleios del pleno cocimiento. La palabra niño es del griego Nepios que significa simple/inmaduro y es uno que carece del Teleios o de la madurez del conocimiento. Pablo le dijo a los Corintianos en 1 Corintios 13:11 Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; más cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño.
Todos estos niños de las localidades estaban llegando a la plenitud, pero ya estaban dentro de los postreros tiempos y no llegaban a la Plenitud de la Unidad de las creencias y firmeza en la Fe en Cristo. Su camino era de un crecimiento muy lento, por eso, Pedro en 2 Pedro 3:18 le dice a los expatriados que estaban creciendo en la gracia y en el conocimiento de Jesucristo y corría el año 65 de la carta y faltaban 5 años para la destrucción del templo y de Jerusalén. El afán del autor de hebreos en Hebreos 5:12 al 6:3 era que fueran ya maestros o doctos y que no fueron esos niños que todavía les tienen que dar la leche de los rudimentos de la doctrina de Cristo. Esos niños del remanente eran inexpertos en la palabra de justicia que era la palabra del discernimiento entre el bien que es la superioridad de Cristo entre el mal que fue la inferioridad de Moisés ante Cristo.
El autor les dice que con rudimentos no podían llegar al Teleios o perfección o madurez del conocimiento pleno o total de Cristo. Que tenían que dejar la leche. Dejar los rudimentos. Dejar las niñerías. Dejar de estar escuchando a los docetistas, gnósticos y judaizantes para poder ir hacia la perfección en sus entendimientos.
Pablo a los corintios en 1 Corintios 14:20 les dice Hermanos, no seáis niños en el modo de pensar, sino sed niños en la malicia, pero maduros en el modo de pensar. Observa que los <niños> tienen un modo de pensar, un modo de juzgar, un modo de hablar. Tenían que ser maduros en el modo de pensar, de evaluar y de sostener su fe en Cristo.
La perfección en el modo de pensar solo la tenemos en Plenitud, porque es la cima de la comprensión de todas las doctrinas o didaskalias de toda la biblia que ya hizo su historia espiritual en el hombre entre Juan 19:30 y Apocalipsis 21:6.
Los cinco dedos transitaron sobre el camino de lo parcial y del espejo. Antes de un período de madurez hay uno de inmadurez. Antes de hombres se estuvo en la de edad mental de niños. Antes de lo perfecto se estuvo en lo parcial. Después del comienzo del Cuerpo de Cristo desde el día de Pentecostés, hubo un período de inmadurez y de transición, durante el cual se necesitaron los dones espectaculares de milagros, lenguas, profecías e interpretación de lenguas. Por ejemplo: En los creyentes en los Corintios, <en parte se conocía y en parte se profetizaba>, y esto nos enseña que era un período de revelación parcial. Pero Pablo predijo en 1 Corintios 13:10 que <algo perfecto estaba por llegar> “más cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará”.
Cuando el Nuevo Testamento se completó (Canon) en toda su revelación y en todas sus consumaciones, cesó lo que estuvo en arras o en parte. ¿Cuándo se acabó lo que fue en parte? Se acabó cuando el Señor reveló a Pablo en 2 Timoteo 3:16 que “Toda la Escritura ya estaba inspirada por Dios”. La palabra “Toda” es del griego “Holos” que significa ¡Integro! ¡Totalizado! ¡Completo!. Ya tenemos una Escritura Toda Plena o Completa.
Inspiración es igual a insuflación o soplo y es del griego Theopeneustos, esta palabra contiene el Theo que es igual a Dios y el Pneo que es igual a viento, soplo o insuflación o inhalación que fluye. Así como Dios insufló en Adán aliento de vida, de igual modo insufló toda Su Escritura y su soplo produjo toda la plenitud de ella. Así como el cuerpo sin espíritu es muerto, la Escritura sin el Theopeneustos es Escritura muerta o sin vida.
El propósito de los cinco dedos fue llevar a los niños en Cristo a Toda la Escritura Inspirada de Dios. 2 Timoteo 3:16 pertenece a la Plenitud de Dios, porque ya está consumada.
Ahora, en nuestra cosmovisión de Reino o la visión de ver todo el Canon de Toda la Escritura completa sin parcialidades, entendemos que nos encontramos en Plenitud y en el REINO no hay niños en Cristo. Los hombres de Reino, tienen revelación, inspiración e iluminación. Están completos en Cristo. Son hombres del estudio de Toda la Escritura. Son teólogos de Plenitud.
En Toda la Escritura Plena no tenemos “partes”. Las <partes> indican lo infantil y <toda> indica lo perfecto. Lo perfecto está relacionado con el conocimiento. La palabra perfecto es del griego Teleios y significa “algo completo que indica una obra terminada y acabada”.
Un niño piensa de acuerdo a la noción que tenga de las cosas. Los niños tienen “nociones” confusas acerca de las cosas, y de acuerdo esas nociones, piensan y se expresan, sin tino ni precisión.
Cuando un niño en Cristo pasa de los rudimentos al hombre maduro de la plenitud, entonces, deja con naturalidad esas primeras nociones infantiles.
Pablo dice “No seáis niños sino maduros en el modo de pensar”, porque el pensar mueve tu hablar. Pablo dijo “Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, y juzgaba como niño”. Lo maduro está en contraste con lo infantil. ¿Cuándo se es infantil? Cuando en <parte> conoce las doctrinas. Observa que Pablo relacionó la palabra <niño> con el <modo de pensar> porque el pensamiento involucra el razonamiento y la mente.
Pablo dijo <más cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño>, observa que el <hombre de Pablo fue el conocimiento> ¿A dónde debes dejar lo que era de niño? En tu mente/entendimiento. En tu mente debes ser hombre y no un niño en doctrinas. Tú tienes que renovar las doctrinas en tu mente. Tienes que dejar a un lado las cosas infantiles, las niñerías, los rudimentos, y eso lo tienes que hacer en tú mente, porque tu mente es la que te va a dar un nuevo lenguaje espiritual. La mente es la representación de tu espíritu.
¿Qué es un niño? ¿Qué es un infantil? Hebreos 5:13 dice ”Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño”. El Iglesismo todavía en 21 Siglos es un inexperto en la palabra de justicia. Un inexperto es uno que carece de experiencia en el conocimiento de una ciencia o profesión.
La palabra de justicia se refiere al alimento sólido y la leche se refiere a los primeros rudimentos de la doctrina de Cristo, el V:12 dice ”Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido”. Un niño es un lechero de rudimentos doctrinales y un maduro es uno de alimento sólido en la palabra.
El V:15 dice: ”Pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal”. ¿Qué es lo que Dios quiere de ti? Que alcances madurez y que te tengas los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal, ¿Cómo se logra eso? Por medio del alimento sólido que enseña lo que es superior que es Cristo sobre lo inferior que es Moisés, que es vino nuevo que supera al viejo, que es el vinculo perfecto que supera a los dos pactos de ley y de gracia.
Los cinco dedos fueron los ministros competentes del nuevo pacto de 2 Corintios 3:6. Estaban por 36 ½ en competencia. Compitiendo la gracia con los maestros judaizantes de la ley. En el Reino, no competimos con iglesismo ni religión.
Pablo compitió en Antioquía y en Tesalónica. ¿Cuál fue la competencia del mal llamado “nuevo pacto”? ¿Quiénes compitieron con Pablo? La competencia vino de los maestros judaizantes que predicaban el evangelio diferente de la letra muerta de la ley. La rivalidad de Pablo siempre fue con ellos. En Hechos 15 los judaizantes de Judea enseñaban que el hombre que no era circuncidado conforma a la costumbre de Moisés, no era salvo. Las practicas rituales de la ley anulaban en el sujeto la gracia de Dios y dejaban sin efecto la muerte de Cristo, Gálatas 2:21, además de llevar a los creyentes, a quienes Cristo había liberado, de regreso al yugo de la ley, Gálatas 5:1; 2:4.
En aquel concilio en Jerusalén se defendió el nuevo pacto y se concluyó antes creemos que por la gracia del Señor somos salvos, de igual modos que ellos, Hechos 15:11. Los ministros competentes se dedicaron por más de 36 ½ años a la defensa del “nuevo pacto” ante la amenaza de los maestros judaizantes de la letra muerta de la ley. ¿Qué fue la letra muerta de la ley? Algo muerto es algo inservible o ineficaz. Es piedra muerta. Es prescripción muerta que no carece de vida por el practicante.
Pablo llamó a la letra muerta en 2 Corintios 3:6,7 el ministerio de muerte, ¿Por qué? Porque vio como una obra de la ley a ser realizada por el judaizante lo que hizo del viejo pacto fu un pacto de teoría letra muerta y no del Espíritu que da vida. Aquí Pablo entró en otra competencia, la competencia doctrinal entre la letra muerta y el Espíritu de vida. La letra muerta fue el ritual que jamás produjo un cambio al interior del judaizante.
La misión de Pablo y de los demás ministros competentes originales fue enseñar la pedagogía del Brít Hadasháh o pacto renovado o mal llamado nuevo pacto a judíos y gentiles. Consistió en afirmarlos en él para que no fueran niños fluctuantes, llevados por las doctrinas gnósticas judías, Efesios 4:14,15 para que siguieran la verdad del nuevo pacto y crecieran en Cristo.
¿A quién hizo Dios ministro competente del nuevo pacto? A todos los apóstoles del primer siglo. Ellos fueron los ministros de Jeremías 31:31-34. La misión de ellos fue dispensar a Cristo el redentor en medio del judaísmo y sostenerlo ante el judaísmo. Todos los apóstoles vivieron dentro del escenario religioso de la competencia de la ley o de la letra muerta y se vieron enfrentados a los maestros judaizantes de la catedra/asiento de Moisés, Mateo 23:2, Hechos 15:5. Esta fue la competencia de Pablo y los demás apóstoles. En el Reno, no tenemos ninguna competencia. En el Reino, no colonizamos para el judaísmo ni para el cristianismo. Esta es la gran diferencia.
¿Qué hubo en la dispensación del nuevo pacto del primer siglo? Hubo la competencia dualista de dos ministerios: Ministerio de condenación y ministerio de justificación, 2 Corintios 3:9. Hubo dos evangelios: Evangelio de la gracia de los ministros competentes y el evangelio diferente de los maestros judaizantes, Gálatas 1:6,7. Hubo dos clases de pactantes: los pactantes del viejo pacto y los pactantes del nuevo pacto, hebreos 8:13. Hubo dos clases de justificaciones: Justificación por las obras de la ley y justificación por la fe de Cristo.
El evangelio de Pablo estuvo fuera de la ley judaica, por eso, se gastó más de 33 años y medio en defender su competencia ante este opuesto de la gracia. Pablo rivalizó, confrontó, a quien perturbara y pervirtiera el evangelio de Cristo. Su lucha en Gálatas 3:1 ¡Oh gálatas insensatos! ¿Quién os fascinó para no obedecer a la verdad, a vosotros ante cuyos ojos Jesucristo fue ya presentado claramente entre vosotros como crucificado? ¿Quién los sedujo? La catedra del judaísmo.
Recopilando, podemos decir que un original ministro competente del nuevo pacto fue:
*Un hombre llamado directamente por Dios a revelar a su Hijo ante quienes no lo conocían en el primer siglo y que lo enseñaron a los hombres de las dos casas de Israel de la profecía de Jeremías 31:31-34
*Que enseñaron que Cristo fue quien les dio fin a las obras de la ley judía en Romanos 10:4
*Que al decir nuevo pacto, estaban dando por clausurado o por viejo al primero y próximo a desaparecer, hebreos 8:13
*Que proclamaron que el pecado fue quitado en hebreos 9:26
*Que dijeron que aun un poquito, y el que había de venir vendría y no tardaría, hebreos 10:37, porque la copa era el nuevo pacto en la sangre de Cristo, y que todas las veces que comieron el pan y bebieron la copa, la muerte del Señor anunciaron hasta que él viniera, 1 Corintios 11:25,26.
Los dedos de Efesios 4:11 creyeron en la venida o Eleusía de Cristo en gloria que fue escatología cumplida en el primer siglo, para los vasos de misericordia de Romanos 9:23, y que dicha venida cerró para siempre todo el cumplimiento del nuevo pacto, y de Cristo recibieron la corona incorruptible de gloria, 1 Pedro 5:4, pues, esperaron según las promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales moraba la justicia perdurable, 2 Pedro 3:13.
¿Cuál es la diferencia entre un ministro competente del nuevo pacto hoy y un ministro del Reino? Que el ministro del Reino no es servidor a ningún pacto de obras o pacto de fe, porque su Fe ya está Consumada. El es un ministro del vinculo perfecto que es el amor incondicional (Colosenses 3:14).
El del nuevo pacto hoy o el hombre de gracia, cree cumplimientos parciales. El hombre del Reino entiende cumplimientos totales y disfruta plenitud, porque está completo en Cristo. El primero cuando cree parcialmente, disfruta efectos parciales. El hombre del Reino disfruta en total o en pleno, porque no está en la era de las creencias parciales, no está en transiciones mentales, no está cruzando puentes doctrinales, sino que está parqueado en definitivo al pleno entendimiento del poder y de la sabiduría de Dios (1 Corintios 1:24).
El hombre del nuevo pacto de hoy, al estar en la era de los pactos, deberá seguir repartiendo la santa cena con pan y vino, seguir anunciando con dicha ceremonia que Cristo murió, y debe hacerlo HASTA que Cristo le regrese por tercera vez, pues en términos de escatología del I Siglo la segunda venida ya fue cumplida en el año 70 d.C. y esto es plenamente demostrable por los hombres de Reino hoy.
El de plenitud al estar por fuera de eras, pactos y dispensaciones entiende que todos los vaticinios y profecías de Cristo en Mateo 24, Marcos 13 y Lucas 21 y por Juan en el libro de Apocalipsis está cumplido, pues, a los pactantes de las 7 iglesias del Asia menor se les habló en términos inminentes con y en las expresiones claras de “Vengo pronto, en breve, el tiempo está cerca”, y ellos en Apocalipsis 22:20 dijeron al unísono: Amén, sí, ven, Señor Jesús, no solo lo creyeron, también lo afirmaron y recibieron el cumplimiento en y dentro de su propia generación, pues, Yahshúa dijo en Mateo 24:34 no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca y aquí generación no es raza, es gente como en Mateo 23:33.
El hombre del nuevo pacto hoy, hace competencias doctrinales con el evangelio de la gracia, tratando de seducir a sus rivales del judeo cristianismo de ley a ver si logra “colonizarlo a gracia” para que se conviertan también en ministros competentes del nuevo pacto hoy. repitiendo la misma pedagogía de Pablo en sus cultos y seminarios. El hombre del Reino no necesita hacer competencias doctrinales; porque ha entendido que Plenitud es la cima máxima de todas las doctrinas y de toda la experiencia del disfrute de la espiritualidad pragmática. El hombre de Reino, cuando enseña ley o gracia, sólo lo hace para recordarle al indocto que la biblia ya hizo historia doctrinal en aquellas dispensaciones del antiguo y nuevo testamento.
El plan de Dios fue la culminación de todo. El plan fue reunir a todos y al cielo y a la tierra en Cristo (Efesios 1:10). Todo ya está potencialmente “Reunido”. Dios, ya reunió a los dos palos de la casa de Israel en el Brit Hadasha que Pablo afirmó en Efesios 2:18.
Dios ahora no está trabajando para terminar. El ya terminó. El ya reunió en Cristo. No puedes “des reunir” lo que Dios en Cristo ya reunió. Tú mismo que me lees estás reunido en Cristo. Tú eres hombre de Reino, lo que pasa es que te metieron en un iglesismo humano y en una religión sistematiza que te doméstico.
Solo puedes entender a Dios desde la cima de las consumaciones (Plenitud); porque una consumación reveló la fidelidad de Dios a lo que prometió y a quienes puso a esperar ese cumplimiento y les cumplió. En el Reino, andamos no en sombras, ni en promesas, sino en realidades de Dios en Cristo.
La palabra ministro tiene 3 connotaciones en el griego: hupréts se refiere a un servidor en relación con su superior, leitourgós en relación con sus responsabilidades públicas, y diakoneo en relación con su trabajo. Los 3 términos se emplean para ministro. Un ministro del Reino no es tu jerarca es tu servidor. No se impone, se baja. No domina, porque no tiene cómo lograrlo en mentes que son iguales en poseer la misma mente de Cristo. Esto del Reino, es otro paseo, es la gran diferencia. Es el espectro adimensional dónde todos debemos estar y llegara el preciso momento en que todos los estaremos. Gracias a los que ya hemos despertado.
y ¿Qué pone en la mesa de tu entendimiento un Ebed? Pone el alimento sólido consumado para 3 cosas: (1) Para que todo lo disfrutes sin miedos, sin terrores apocalípticos, proveyéndote de un escudo de convicciones y seguridades plenas, (2) Para que aprendas a reinar en vida, libertad y plenitud, vida donde no hay muerte, libertad dónde no hay esclavitud de ritos, religiones ni sistemas, y plenitud dónde no hay carencias y siempre te verás lleno y completo sin ningún vacío doctrina ni espiritual, (3) Para que empoderes en ti al poder de todos los poderes que es el amor incondicional, dónde no hay pactos, condiciones, límites, fronteras cerradas ni restricciones al otro por posiciones, condiciones, colores o posturas. El amor incondicional opera en el campo de lo imperfecto e imperfectos.
La biblia es el libro de todas las consumaciones de Dios. Los ministros del nuevo pacto del I Siglo fueron aquellos apóstoles originales que desarrollaron toda la pedagogía del pacto antes del cierre de los ciclos consumados de Dios. Nosotros hoy, somos ministros del único Reino y no de los ciclos ni de los pactos, ni de las eras, dispensaciones, esperanzas, ni de las promesas a cumplirse, somos ministros de glorias manifestadas por vía de cumplimientos de Dios en Cristo. El Reino no tiene ninguna transición pendiente. El Reino es la esfera de la plenitud de Dios realizada. El Reino es de carácter y de naturaleza espiritual. No es un Reino político y militar a la espera que baje del cielo. Si tienes al Reino, tienes al Rey. Dónde hay Reino hay Reyes. El gran desafío para los Jerarcas del Iglesismo y el sistema de Religiones es ¿Están dispuestos a ser Ebeds en el Reino? Entrad por la puerta estrecha.
Este documento pertenece a la *Universidad Reino* Prohibida la copia electrónica, escrita, digital, sin una debida certificación y permiso del Ebed: Dr. Rey Estrada (Derechos reservados). Solo si lo usas para enseñar y predicar con el mismo título, contenido y autor, eres libre de compartirlo. Estudia con nosotros la Universidad Reino 1 - https://www.reyestrada.com/universidadreino-1
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