Conozca al Dios del Reino: Capítulo 1
Sección 6: Dónde está Dios
Conocemos que, Dios es Espíritu (Juan 4:24) también conocemos que Cristo en (1 Corintios 15:46) que es el Espíritu Vivificante. Dios/Cristo como Espíritu Vivificante es el que da vida que es la vida divina impregnada. El propósito de Dios/Cristo siempre fue derramar de sí mismo al hombre y por eso, hizo el “espíritu” del hombre como la vasija de su presencia. Pablo le dijo a Timoteo en 2 Timoteo 4:22 que el Señor esté con tu espíritu. En la vasija está Dios. Dónde está Dios su presencia con sus atributos están todos por encima de todo lo creado. Cada elemento de lo creado, está diciendo que a él lo creo Dios. No se creó, asimismo. Ese elemento o ese algo existe, porque si no fuera no existiera. Dios tiene que estar en el hombre en el área, plano, dimensión o esfera que dentro del hombre sea espíritu o espiritual. Dios, no puede estar en el organismo del hombre, porque al declinar, enfermar o morir el sistema, se acabaría Dios. Todas las cosas de la creación están ante la vista de Dios.
Conocemos que, existen dos clases de sustancias: espirituales y físicas. Una sustancia física está hecha de partes. El aire que respiramos, por ejemplo, está compuesto de nitrógeno y oxígeno. Estos, a su vez, de moléculas, y las moléculas de átomos, y los átomos de neutrones, protones y electrones. Que cada trocito del universo material está hecho de sustancias físicas. Que las sustancias físicas llevan en sí los elementos de su propia disolución, ya que sus partes pueden separarse por corrupción o destrucción. Que una sustancia espiritual no tiene partes. Es un entero. Es un Todo. Que no hay nada que pueda romperse, corromperse, separarse o dividirse en la esfera del Espíritu. Que una sustancia espiritual es una sustancia divina y ésta es la razón de que las sustancias espirituales sean inmortales. Que fuera de un acto directo de Dios, no hay modo de que dejen de existir.
Conocemos que, la presencia de Dios es sin límites. Es un Ein Sof (Sin límite). Que no hay lugares fuera de su presencia ni de su vista. La presencia de Dios, nada tiene que ver con el tamaño. El tamaño es algo perteneciente a la materia física. «Grande» y «Pequeño» no tienen sentido si se aplican a un espíritu, y menos aún a Dios. No, no es que una parte de Dios esté en este lugar y otra en otro. Todas las partes están en Dios. Cuando la biblia dice que Dios es Grande, no es de tamaño, es de asombró.
Conocemos que, si todas las partes o elementos de la creación están en Dios y es soberano, entonces ¿Por qué Dios se queda callado ante el dolor y la pena? ¿Debería estar donde esa mujer ha sido violada? ¿Dónde está Dios cuando atacan los fenómenos naturales? ¿Dónde estuvo Dios cuando ese hombre saltó del puente al abismo? ¿Dónde está Dios cuanto más lo necesito? ¿Dónde está Dios ante el sufrimiento humano? Lo que no se entienden es que Dios ya creó todas las leyes, recursos, respuestas, reacciones efectos, consecuencias y fuentes para la felicidad. Que al universo le dio leyes que lo rigen y conducen. Que al cuerpo le dio leyes. Que a la naturaleza le dio leyes. Que al hombre le dio leyes y principios. Que el universo no es un ente al azar, a la chiripa o al a casualidad, es un ente programado por sus propias leyes que lo rigen. Que este universo está regido por leyes y no puede existir ni subsistir sin su legislador original. Que Dios se expresa en todo como ley. Que la ley de gravitación, cohesión, relatividad, causa y efecto, las leyes de la electricidad, del amor, de manifestación, de polaridad, evolución, correspondencia, armonía, química, física, todas las leyes psíquicas, son expresiones de la voluntad de Dios. Qué ley es un principio inmutable que rige el ordenamiento, el funcionamiento y la administración del universo. Que ningún ser humano es el creador de las leyes rectoras, porque la ley es un asunto inmutable, pero lo que si el hombre ha hecho es desarrollar las normas de esas leyes inmutables para organizar la sociedad y estas son variables y están sujetas a derogación. Que todo lo que está dentro de cada ley funciona a la perfección y fluye por sí solo. Que todo lo que está fuera de cada ley, no es difícil, sino imposible que funcione bien o a la perfección. Que cuando aprendes a diferenciar lo que está dentro de cada ley de lo que está fuera de la ley comienzas a comprender que: Que todo el bien que uno necesita está dentro de cada ley y que todo el mal se encuentra fuera de cada ley. Que cuando uno valora y ama lo que tiene automáticamente se encuentra dentro de la ley. Que al obedecer la ley está ahí para poder liberarnos del sufrimiento latente.
Conocemos que, Dios está dentro de cada ley del universo como Señor de esa ley. Que cada ley va con la presencia de Dios. Que las leyes manejan todos los procesos necesarios para el éxito del universo. Que estas leyes se aplican a todo cuanto existe; a todo lo manifestado, lo producido, lo generado, en todos los niveles y dimensiones. Que lo visible de este universo fue sacado de lo invisible de Dios. ¿Cuándo comenzamos a comprender este universo en que estamos? Cuando comenzamos a conocer las siete leyes de este universo y las verificamos que se aplican a todo lo que se hace, se piensa, se siente, se ve, se percibe y se imagina. Estas leyes nos permiten conocer para qué estamos aquí y hacia dónde nos dirigimos.
Conocemos que, quién reconoce el universo, acepta a Dios su creador original. Que las leyes son como las reglas del juego con que se vive en este mundo. ¿Qué nos enseñan estas leyes? A no ir en contra de ellas, y a fluir con él universo. Que estas leyes nos permiten salir de la ignorancia y entrar a la luz de la sabiduría, la paz, el amor y la felicidad. Que no puede existir nada fuera de la ley, porque se caería este universo. Nadie puede evadir ni cambiar sus leyes, porque estaríamos alterando el orden del universo. No existe una excepción que confirme la regla. Todo lo que en este universo nos parece absurdo o injusto y todo lo que es incomprensible para nuestra mente racional, está dentro de las leyes que rigen los procesos de cambio y transformación constante del hombre. Todo lo que existe fue creado por Dios y es perfecto, tiene que ser perfecto, porque genera un propósito y una función específica. Que la comprensión de estas leyes en su debida aplicación, son las que pueden con la ayuda de su fuente ulterior hacer posible que este mundo sea cada día mejor por medio de sus practicantes, alumnos y aprendices. ¿Por qué la ignorancia? ¿Por qué el sufrimiento? ¿Por qué la guerra? ¿Por qué todavía la esclavitud? ¿Por qué la violencia? ¿Por qué la injusticia? ¿Por qué el odio? ¿Por qué las pasiones que combaten dentro del alma del individuo? ¿Por qué las enfermedades? ¿Por qué la maldad? ¿Por qué la desarmonía? ¿Por qué lo de ricos y pobres? ¿Por qué el sufrimiento personal? ¿Por qué la muerte? Porque el hombre todavía está parado frente al árbol de las leyes del universo “el día que te levantes en contra de ese árbol de leyes, ese día morirás, sufrirás, te enfermarás, te caerás”.
Conocemos que, el estudio y la comprensión del “Por qué” sucede lo que sucede día a día en este universo, nos puede proporcionar el conocimiento que nos permita crear un mundo y futuro mejor para las nuevas generaciones que vienen a este universo “generación viene y generación va, más la tierra permanece para siempre”, y también para los hoy presentes en este universo que actualmente desean cambiarlo, mejorarlo, y entrar en el fluir de la armonía la positiva evolución del hombre en el universo. Que mientras no se conozcan estas leyes, se violan sin saberlo, produciendo sufrimiento continúo. Estas leyes obligan a la verificación personal, por ejemplo: ¿Cómo puede un niño conocer la existencia de la ley de la gravedad? Solamente experimentando lo que se siente al caerse de una bicicleta. ¿Qué le implicó esa caída? Le implicó soportar o sufrir una consecuencia física leve. ¿Qué le permitió esa caída? Le permitió tener conciencia para luego evitar el próximo sufrimiento o destino que le vendrá por una nueva caída. ¿Por qué se sufre? Porque se va en contra de las leyes del universo. ¿Por qué es necesario reconocer estas leyes? Para evitar transgredirlas. Que el conocimiento libera del sufrimiento y es la luz de la ignorancia. Que como todo lo que se halla en la naturaleza es explicado por la ley de causa y efecto, así también, la naturaleza debe explicarse en conjunto. Debe haber alguna causa. Esta causa debe ser diferente del efecto. Debe ser alguna entidad sobrenatural, es decir, Dios. La naturaleza no es una mera colección casual de acontecimientos, una mera mezcolanza de incidentes, sino algo ordenado. Los planetas se mueven con regularidad en sus órbitas; las semillas crecen constantemente hasta ser árboles; las estaciones se suceden en orden. Ahora bien, la naturaleza es insensible. No puede ordenarse a sí misma. Requiere la existencia de un ser inteligente Dios - que sea el autor de ese orden. Aún Einstein, el científico, estaba firmemente convencido de que la creación del universo se debe a una Inteligencia Suprema. Que, aunque usted no ve las estrellas durante el día, ellas existen. Aunque usted no puede ver el sol durante un día nublado, él existe. Así también, aunque usted no puede ver a Dios con estos ojos físicos, Él existe. Si usted logra despertar el ojo divino u ojo de la intuición por la práctica de la meditación, usted lo verá. Dios se demuestra por sí mismo. Él no requiere ninguna prueba, porque Él es la base del acto o proceso de todo intento de prueba. Todas estas leyes hacen que el mundo funcione a la perfección. ¿Dónde está Dios? No existe nada donde Dios no esté. El es el Todo y Todas las cosas están a su vista, poder, y señorío.
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