¿Qué es la vida? La vida es la manifestación de un plan divino, y ¿Cuál es ese plan? Es ponerle sentido a la vida, ¿Cómo? La vida es vivir. Un dogma no te da sentido. Una filosofía tampoco. Una creencia religiosa mucho menos. Lo que le da sentido a tu vida es viviéndola.
La vida no es una meta es un proceso. No es un misterio es una revelación tangible. En la vida siempre tendrás dos opciones. Tu vida es como un lienzo en blanco, puede pintar felicidad o infelicidad.
La vida es una respuesta a cuatro preguntas: (1) ¿Cuál es mi origen?, (2) ¿Cuál es mi realidad?, (3) ¿Cuál es mi sentido de vida?, (4) ¿Cuál es mi destino? La vida te dará casi 100 años para que le des respuestas a estas cuatro preguntas.
Cada día que amanece, te has de levantar para explorar los significados de la vida. La vida siempre va a tener el significado que ahora mismo le estás dando con tu forma de pensar, de sentir y tu manera de vivir.
Tu vida es un acto creativo que cada día estarás repitiendo con tus pensamientos, sentimientos, decisiones y acciones. Cada acto te dará el significado de vida. ¿Qué clase de vida quieres? Tus actos te darán esa clase de vida
Construyes significados de vida por medio de tus acciones. Tú le pones el sello a tu vida con tus hechos. Tu significas tu propia vida.
Hagamos un ejercicio: Saca de tu bolsillo un billete de tu país, ¿Cuál es el sentido de ese billete? Me dirás sirve para un propósito cuál sería para hacer un intercambio o transacción económica. Ah, ok, entonces ese “Billete” no tiene sentido, porque el sentido es el que tú le estás dando.
Nada que tengas en tu vida y aun tu vida misma, sin propósito tendrá sentido o significado. El billete no es nada sin no le das sentido. Si a tu vida no le das sentido, tu vida es nada.
Somos nosotros mismos los únicos que le damos sentido a nuestra vida humana. Sin propósito no hay sentido o significado. No hay “Significado de vida” si no le ponemos un propósito o utilidad. Muchas cosas en tu vida carecen de valor, porque no le has puesto propósito.
El propósito es el que te mantiene vivo en este planeta. El 70% de la población del mundo tiene un estado mental de inutilidad. He oído a muchos decir que la vida es injusta, no, la vida es bella, lo que es injusto de parte tuya es no darle un plan, una carrera, y un propósito especifico.
La vida no hace nada sin un propósito en mente. Créale un evento a tu vida. Ponla al servicio de los demás por medio de tu talento, profesión o vocación. Hazte útil en la sociedad.
Tu vida es para escribir- Tu vida es para hacer música. Tu vida es para defender a los desvalidos- Tu vida es para luchar contra la injusticia. Tu vida es para construir un capital espiritual. Tu vida es para hacer misión.
Tu poder personal está en el propósito que le pongas a tu vida. Tu vida es para desarrollar el guion que le quieres dar a tu vida, pero serás el único responsable por tu guion. Tus propósitos serán tus intenciones, porque tu intención es la determinación firme de hacer algo provechoso.
En cada propósito trazado estarás consagrando tu tiempo, talento y tu vida a ese ideal y objetivo. No naciste para una vida ordinaría, naciste para una vida extraordinaria que te la darán los propósitos o intenciones de tu corazón.
Si no tienes una vida con propósitos, no pasa nada. El cielo no te va a castigar por ello, pero tu vida vivirá de las casualidades y no de las causalidades. El propósito está vinculado a tu significado de vida. ¿Cómo ponerle sentido a tu vida? Se la pones con intenciones. Que algo hecho por ti, te deja una amplia sonrisa en tus labios.
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